IA en Amazon 2025: De Buscar a Preguntar

Fernando Aparicio
Fernando Aparicio
Director de Nifty Export

04/07/2025

De la época donde Amazon destronó a Google en el viaje del comprador digital, impulsado por la regla inmisericorde de “cuantos menos clics para conseguir lo que queremos, mejor” hemos evolucionado a un ecosistema gobernado por inteligencia artificial, donde las recomendaciones, la personalización y la conversación con el usuario definen la experiencia de compra. Hemos pasado de buscar a preguntar, directamente.

La aparición de Rufus, un asistente conversacional integrado en el buscador, y el sistema COSMO, que analiza contexto e intención de cada una de nuestras conversaciones en Amazon, marcan una nueva era en la forma de posicionar productos dentro del marketplace.

De keywords a contexto

La era del SEO clásico dentro de Amazon (basado en el algoritmo A9) ha evolucionado a un nuevo modelo para conseguir nuestros objetivos digitales. Si antes bastaba con repetir la keyword principal en el título y bullets hasta crear un batiburrillo infumable hoy Amazon prioriza cual es nuestra intención de búsqueda.

COSMO (Common Sense Model) se encarga de analizar sinónimos, lenguaje natural, relaciones entre productos y hasta el historial del usuario (pedidos, ubicación, intereses) par para ofrecernos una inteligencia semántica que permite a Amazon interpretar una frase como «quiero un portátil barato para estudiar oposiciones” como que:

  • Quiero un dispositivo económico y funcional
  • Que el uso será ofimática, no gaming ni diseño gráfico
  • Que necesita buena batería y teclado cómodo
  • Que probablemente no requiere gran capacidad de almacenamiento
  • Que prioriza precio y fiabilidad antes que marca o diseño

Para este caso, Amazon mostrará portátiles tipo Chromebook o gamas medias con Office incluido, batería duradera y buenas reseñas para estudiar, no el último MacBook Pro.

A la pregunta sobre “¿qué regalar a un adolescente que le guste la música?”, Rufus nos ofrecerá recomendaciones personalizadas en tiempo real. Alimentado por modelos generativos, Rufus no solo interpreta la intención del usuario, sino que selecciona productos, resume reseñas, compara alternativas y genera respuestas basadas en datos internos y comportamiento previo. Para las marcas, esto implica una nueva capa de optimización: ya no basta con posicionarse en keywords, hay que crear contenido relevante que Rufus pueda entender, citar y destacar.

Esto obliga a los Sellers a preparar las fichas de producto para una triple audiencia: el cliente, COSMO y Rufus, con una estructura ideal que pudiera contener lo siguiente:

  • Título con keyword principal y beneficio claro.
  • Bullets que combinen características funcionalidades con ventajas claras y cómo responden a la solución de un problema del usuario.
  • Descripción que cuente el contexto de uso.
  • A+ Content con secciones visuales, comparativas y texto legible.
  • Imágenes con texto descriptivo relevante (sí, Amazon usa su sistema Amazon Rekognition, el mismo que empezó siendo utilizado por la policía USA para el reconocimiento facial)
  • Backend keywords para variantes semánticas.

Amazon también resume automáticamente reseñas y Q&As, y estas influyen directamente en lo que Rufus recomienda. Una ficha que responda preguntas como “¿para quién es?” o “¿qué problema soluciona?” tiene más probabilidades de ser citada por la IA. Como en el GEO tradicional, las FAQs adquieren una relevancia clave.

Un ejemplo de la lógica “beneficio + explicación” sería pasar de un título como “Auriculares Bluetooth deporte inalámbricos IPX7 con micrófono para correr gimnasio” a otro como “Auriculares Bluetooth inalámbricos con ajuste seguro – Ideales para entrenar sin interrupciones, resistentes al sudor (IPX7) y con micrófono integrado para llamadas nítidas”

En realidad, los factores de ranking siguen dependiendo de aspectos como la velocidad de ventas, tasa de conversión (CVR),, clics (CTR), ratio de devoluciones y opiniones de los usuarios. Solo que ahora, si detecta deficiencias en la ficha, la propia plataforma puede reescribir parte del contenido mediante IA generativa, afectando también su posicionamiento.

El uso de publicidad dentro de Amazon para impulsar nuestras ventas tiene también un impacto positivo en el SEO, no en vano, por definición, las campañas buscan la aceleración de ventas, señal positiva identificada por Amazon para preferir unos productos sobre otros (del mismo modo que no “puntúa” lo mismo utilizar la logística de Amazon que cualquier otro operador logístico). Amazon interpreta el éxito de una campaña como una señal de calidad del producto. Cuanto mejor funcione tu PPC (CTR, CVR, velocidad de ventas), mejor posicionamiento orgánico obtendrás, en un círculo especialmente virtuoso para el propio Amazon. Incluso el tráfico externo desde redes sociales puede mejorar el SEO si se mide con Amazon Attribution.y, por supuesto, cualquier esfuerzo de generación de marca que se haga fuera de Amazon que le haga “inferir” que un producto es más recomendable que otro.

inteligencia artificial

Aplicación de la IA en Amazon para mi estrategia internacional

La integración de la IA en Amazon no solo mejora la visibilidad local, sino que se convierte en una herramienta decisiva para escalar internacionalmente. Al adaptar las fichas de producto con lenguaje natural, beneficios explícitos y contenido estructurado, se incrementa la relevancia semántica en mercados donde las búsquedas no siguen una traducción literal.

Por ejemplo, una keyword como “buggy” en Reino Unido puede corresponderse con “carrito de bebé” en España, y será el sistema COSMO quien entienda el contexto si las fichas están bien trabajadas. Esto permite que un contenido único, correctamente localizado y orientado a resolver intenciones de búsqueda reales, se posicione con más eficacia incluso en mercados sin campañas de publicidad activas.

La inteligencia artificial de Amazon también permite testar mercados con bajo riesgo, gracias a la generación automática de títulos, bullets y resúmenes en otros idiomas. Si una pyme española lanza una ficha en Alemania o Francia con contenido base en castellano, Amazon puede reescribirlo parcialmente con GenAI, siempre que el contenido original tenga estructura clara (aunque lo recomendable siempre es tener control total sobre el contenido producido). Esto reduce el coste de entrada y facilita un enfoque escalable: primero se lanza con contenido adaptado por IA, luego se optimiza localmente con datos reales de búsqueda y comportamiento.

Por último, el uso de Rufus y los nuevos modelos conversacionales abren oportunidades para que nuestras fichas aparezcan en recomendaciones contextuales, sin necesidad de competir directamente en pujas de PPC. Si un producto está bien definido (título optimizado, imágenes legibles, bullets resolutivos), Rufus puede seleccionarlo para responder a consultas como “regalo útil para abuelos que viven en el extranjero” o “producto español recomendado por expertos”. Esto redefine la internacionalización en Amazon: ya no se trata solo de traducir y vender, sino de conversar y resolver, con la ayuda de una IA que decide qué productos cruzan fronteras digitales.

Imaginemos una empresa de cosmética que, primero redacta la ficha del producto en español con estructura clara:

  • Título con beneficio: “Sérum natural con caléndula – Hidratación intensa para pieles sensibles”
  • Bullets resolviendo problemas: “Calma rojeces y regenera – Fórmula vegana sin perfumes artificiales”
  • Imágenes con texto visible: “97% ingredientes ecológicos”, “Textura ligera, no grasa”

Gracias a esa estructura clara, Amazon puede reinterpretar automáticamente los contenidos mediante GenAI, y hacer que Rufus y COSMO los entiendan como relevantes para búsquedas como:

“Gesichtsserum für empfindliche Haut ohne Duftstoffe”
(Sérum facial para piel sensible sin perfumes)

En lugar de competir por keywords duras como “serum hyaluron”, su producto aparece como sugerencia ante preguntas del tipo:

“Was kann ich bei Rötungen im Gesicht verwenden?”
(¿Qué puedo usar para calmar las rojeces en la cara?)

El resultado sería obtener tráfico cualificado sin apenas inversión publicitaria, gracias a su capacidad de “responder” mejor que otras a las consultas de los compradores alemanes.

Conclusión

Amazon ha dejado de ser un buscador de productos para convertirse en una plataforma de descubrimiento inteligente. Al igual que en estrategias GEO fuera de Amazon, quien quiera vender con éxito en 2025 debe optimizar pensando en algoritmos que leen, interpretan y deciden qué mostrar. Las pymes y marcas deben prepararse para escribir para asistentes conversacionales, en la medida en la que ofrecen respuestas más “humanas”. Porque en la nueva era del e-commerce, la IA no es una opción: es el algoritmo que te muestra… o te borra del mapa.